
Irán Endurece Penas para Mujeres que No Usen Velo Hasta 10 Años de Cárcel
El Consejo de los Guardianes de Irán aprobó una nueva ley que endurece las penas para las mujeres que incumplen el estricto código de vestimenta islámico, especialmente aquellas que no utilicen el velo. Esta normativa entrará en vigor cuando el Gobierno iraní la promulgue.
La ley de “Apoyo a la Cultura de la Castidad y el Hiyab”, rechazada en octubre de 2023 por ambigüedad, finalmente fue ratificada. Según la agencia Mehr, Ahmad Rastineh, portavoz de la Comisión Cultural del Parlamento, confirmó que el Consejo de los Guardianes notificará pronto esta ley al Gobierno.
Este nuevo marco legal impone penas de hasta 10 años de cárcel a las mujeres reincidentes que no respeten el uso del velo. Además, establece multas de hasta 2.000 dólares, la confiscación de vehículos y la prohibición de conducir. Otras sanciones incluyen deducciones de salario, despidos y la prohibición de acceder a servicios bancarios.
El Nuevo Presidente Iraní y su Promesa de Cambio
El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, había prometido durante su campaña electoral que suavizaría las políticas de vestimenta. Sin embargo, expresó su sorpresa al ver que la Policía de la moral seguía patrullando las calles. A pesar de sus declaraciones, la promulgación de esta ley endurece las sanciones para las mujeres que se resisten a llevar el velo.
La muerte de Mahsa Amini en septiembre de 2022, detenida por no usar el hijab correctamente, desató protestas en todo el país. Desde entonces, muchas mujeres han optado por no usar el velo, desafiando las leyes del régimen en un acto de desobediencia civil.
Críticas Internacionales a la Nueva Ley
La ONU y sus expertos calificaron la ley como una forma de apartheid de género. Aseguran que las autoridades iraníes utilizan la discriminación sistemática para controlar a mujeres y niñas en el país.
Durante los últimos dos años, el gobierno iraní ha intentado reinstaurar el uso obligatorio del velo mediante medidas coercitivas. Algunas de estas acciones incluyen la confiscación de vehículos y el regreso de la Policía de la moral, que arresta a las mujeres que no lo usan. A pesar de esto, muchas iraníes continúan desafiando las normativas vigentes.